Alternativas de ingreso por admisión directa: Esta es una de las mayores ventajas, el requisito para postular a la carrera de elección para régimen vespertino es que la persona esté trabajando en el área de su carrera y sea egresado de enseñanza media. Además es una posibilidad para los egresados de enseñanza que determinan trabajar el año siguiente dándoles una alternativa de continuar su desarrollo profesional compatibilizando trabajo y estudio.


Becas: Al ser UNAB una universidad acreditada, los alumnos tienen la oportunidad de acceder a becas y al Crédito con Aval del Estado (CAE). Además la Universidad cuenta con becas que cubren parte del arancel, las que se pueden simular a través de https://simuladorbecas.unab.cl/vespertino/


La misma malla, el mismo título, la misma Universidad: Las mallas son exactamente las mismas, la calidad docente y títulos son certificados por el Ministerio de Educación, pudiendo optar en algunas carreras a una doble titulación en una universidad extranjera.


Eficiencia en el uso del tiempo: Los estudiantes vespertinos saben que durante el día tienen una determinada cantidad de tareas, por lo que deben lograr organizar su tiempo de manera eficiente.


Insertarse antes en el mundo laboral: La ventaja no sólo radica en poder trabajar y estudiar, sino que esta opción también ofrece la posibilidad de aprender con la práctica casi automática, aspirando a un mejor posicionamiento entre sus compañeros.


Flexibilidad horaria: Los docentes tienen en cuenta que la mayoría de sus alumnos trabaja, por lo que la flexibilidad es mucho mayor para la asistencia a clases o la puntualidad.


Desafío personal: La decisión de estudiar vespertino no es fácil, pues la gran mayoría de los alumnos debe necesariamente compatibilizar estudio con trabajo y a eso se suma que un porcentaje importante es casado y con hijos. El alumno vespertino enfrenta un gran desafío para cumplir sus metas y sueños.